Álex Salas, doctor en ecología y experto en biodiversidad y educación ambiental, nos habla sobre el valor de la biodiversidad en el mantenimiento de la vida en nuestro planeta y cómo la educación ambiental es una herramienta fundamental para asegurar un futuro sostenible.
La alarmante disminución de las poblaciones de fauna silvestre en las últimas décadas evidencia la urgencia de actuar frente a la pérdida de biodiversidad. Según el informe de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES) alrededor de 1 millón de especies están en riesgo de extinción y el 75 % de la superficie terrestre y el 66 % del medio marino han sido alterados significativamente por actividades humanas. El informe Planeta Vivo de WWF revela que el tamaño promedio de las poblaciones de vertebrados se ha reducido un 73 % entre 1970 y 2020, con descensos aún más drásticos en especies de agua dulce (-85 %) y en regiones como América Latina y el Caribe (-95 %). Este declive está vinculado a factores como la deforestación, la contaminación, el cambio climático, la sobreexplotación de recursos o la introducción de especies invasoras que no solo comprometen la riqueza natural, sino también el equilibrio de los ecosistemas de los que depende nuestra supervivencia.
En esta conversación, Alex Salas, doctor en ecología y experto en biodiversidad y educación ambiental, nos invita a reflexionar sobre el papel esencial de la biodiversidad para garantizar los servicios ecosistémicos—como la regulación del clima, la polinización o la calidad del agua—y sobre las graves consecuencias derivadas de su deterioro. A partir de su experiencia, nos mostrará cómo la concienciación y el compromiso ambiental pueden convertirse en herramientas poderosas para inspirar a las nuevas generaciones y formar agentes activos capaces de liderar la protección y restauración del medio ambiente.