Hay docentes que son la encarnación de la entrega y el entusiasmo. El equipo del colegio Santa Teresa de Jesús, en San Juan de Aznalfarache (Sevilla), representa como pocas la vocación de enseñar y el deseo de inspirar a su alumnado para que sean personas comprometidas con el cuidado del entorno
Desde que Matilde se unió a Naturaliza hace varios años, ha sabido integrar las propuestas y recursos de Naturaliza en su propio proyecto educativo, siempre buscando que tengan sentido dentro de sus objetivos pedagógicos. Desde el Comité Ambiental —un equipo de docentes decididos a impulsar la sostenibilidad en su centro—, están logrando que el colegio avance, con paso firme e ilusión, hacia la integración de la conciencia ecológica en todas las áreas educativas. Uno de los grandes retos de este comité es promover el intercambio de experiencias entre distintas edades; así, en ocasiones, son los mayores de primaria quienes comparten aprendizajes con los más pequeños y, otras veces, sucede a la inversa, promoviendo que los estudiantes de educación primaria ayuden a sensibilizar a sus compañeros de secundaria. Para reforzar este espíritu, han creado la figura del Ecodelegado o Ecodelegada de aula.
Durante estos años, tanto la variedad de temas tratados como la riqueza de las iniciativas ha sido extraordinaria. Os mostramos solo una pequeña selección de las actividades que en este centro educativo han puesto en marcha, porque… ¡sería imposible recogerlas todas!
Esta propuesta de clase fuera del aula de Naturaliza para 2º de primaria está orientada a trabajar la relación con los seres vivos a través del cuidado responsable. En una edad en la que es muy habitual el hecho de tener mascotas, el alumnado aprendió a diferenciar las especies domésticas de las silvestres, a conocer qué cuidados requieren plantas y animales, y la importancia de prevenir la liberación irresponsable de mascotas en el entorno natural, evitando así problemas con especies invasoras. Todo ello de la mano de dos entrañables personajes: Girasol y Conejo, que acompañaron a los estudiantes en sus descubrimientos.

La “Semana Redonda de Naturaliza”, que se celebra desde Naturaliza para para conmemorar el Día de la Educación Ambiental (el 26 de enero), es la cita anual a la que el colegio Santa Teresa de Jesús no falta.
En la V edición (2025), el alumnado reflexionó sobre cómo proteger la naturaleza es fundamental para preservar la salud los seres vivos y los ecosistemas. Matilde nos compartió lo impactante que fue ver al alumnado de 2º de primaria construir un botiquín simbólico para “curar” al planeta:
"Ha sido una experiencia impresionante. Después de poner en común las enfermedades de nuestro mundo, hemos intentado completar un botiquín de primeros auxilios para curar a nuestro planeta y no enfermar nosotros. GRACIAS por el material tan bueno que habéis elaborado para ayudarnos a sensibilizar a nuestro alumnado".
El año anterior, la IV Semana Redonda (2024), estuvo dedicada a la armonía de la naturaleza y en esa ocasión, el alumnado de 6º de Primaria preparó una coreografía para la canción Armonía y la compartieron con el alumnado de 1º, demostrando que la conexión con la naturaleza puede bailarse y compartirse con alegría.
El pasado curso, Naturaliza celebró el Día Mundial de la Infancia (20 de noviembre) con una acción colectiva para reconocer el valor y el potencial de los más pequeños para cuidar el planeta, y el derecho a disfrutar de un medio ambiente sano. En la propuesta llamada “Los guardianes del planeta”, se ponían en valor los superpoderes de la infancia: un sinfín de cualidades que, en ocasiones, se nos van olvidando cuando alcanzamos la edad adulta. El alumnado aprendió que, desde su corta edad, pueden ser agentes activos en la protección del planeta. El grupo de 2º decidió traspasar los límites del centro educativo y salir a explorar para diagnosticar y analizar el estado de su entorno, reflexionar sobre los problemas encontrados y proponer soluciones.
"Estaban muy motivados, veían latas donde 4 adultos no nos dábamos cuenta” nos decía sorprendida, “y veían la basura y las posibilidades de un barrio donde hay árboles, pero no están cuidados".
Su motivación y capacidad de observación fue sorprendente y lograron convertirse con orgullo, en “aula guardiana del planeta”.

En este colegio, la correcta gestión de los residuos está presente en el día a día y no se baja la guardia. El alumnado separa los diferentes tipos de residuos en las papeleras adecuadas y participa en talleres creativos de reutilización.

Uno de los favoritos fue transformar briks en originales botes para lápices con divertidos personajes. ¡Cómo este con una simpática vaca lechera!

A base de esfuerzo conjunto y gracias a las donaciones y el trabajo de muchas familias, han transformado un antiguo patio andaluz en un alegre huerto escolar.
Ahora el alumnado, disfruta observando el crecimiento de las plantas y cómo va evolucionando la cosecha: berenjenas, tomates, pimientos, zanahorias, judías, garbanzos, patatas, calabacines, pepinos, hierbas aromáticas (hierbabuena y romero) y hasta girasoles.
Un espacio muy bien aprovechado en el que, los cursos superiores son los encargados del riego, y durante el verano, gracias a la implicación de las familias que se han llevado las plantas a sus casas, han seguido bien cuidadas. Como reto añadido, se impulsó también la creación de un jardín vertical, que el alumnado cuida con dedicación.

En este centro hasta las paredes inspiran al alumnado a través de coloridas decoraciones y mensajes que además de hacer más bonito el espacio, recuerdan, cada día, la importancia de respetar y proteger el planeta.

Equipos docentes como los de este centro educativo, demuestran con ilusión y compromiso que es posible educar en valores ambientales y sembrar las semillas del cambio que nuestra sociedad necesita. Gracias al colegio Santa Teresa de Jesús por mostrarnos, con el ejemplo, que el cambio está en nuestras manos.