Última hora ambiental

Gamificación y videojuegos para aprender a cuidar el planeta

Gamificación

Introducir la gamificación en el aula puede ser una buena manera de captar la atención del alumnado, y si lo hacemos a través de videojuegos y aplicaciones y nos convertimos en verdaderos gamers, la diversión y el aprendizaje están (casi) asegurados. Hacemos una selección de las mejores herramientas, en español e inglés, para introducir el medioambiente en el aula de una manera diferente.

Asimilar aprendizajes por vías lúdicas es tan antiguo como el propio concepto de educación. Si la revolución digital ha puesto de moda el término gamificación y ha disparado el potencial de la simbiosis entre juego y formación, ¿por qué no aprovecharla en clase? Aprender jugando es una estrategia que consiste en convertir la enseñanza en algo divertido, especialmente para los más pequeños. Además, gamificación puede ayudarnos incluso a enganchar a aquellos que, por alguna razón, están menos motivados por una asignatura, fomentando algo tan importante en el proceso de enseñanza – aprendizaje: la motivación. A continuación, te ofrecemos diferentes recursos para que tus alumnos jueguen mientras adquieren conciencia medioambiental.

Videojuegos en clave verde

Son el modo de entretenimiento favorito entre los nativos digitales. Las nuevas generaciones pasan horas y horas superando fases, desentrañando acertijos estratégicos y enfrentando desafíos virtuales de toda índole. Y miles de escuelas en todo el mundo ya aprovechan el abanico didáctico que despliega la inmensa oferta disponible. Algunos de los principales fabricantes han unido esfuerzos en la iniciativa Playing for the Planet, que nació el pasado 2020 amparada por el Programa Ambiental de la Naciones Unidas. El objetivo: conectar cultura gamer y una mayor conciencia sobre la necesidad de cuidar la Tierra.

La iniciativa Playing for the Planet de la ONU conecta la cultura gamer y el cuidado de la Tierra

Entre sus muchos proyectos destaca The Green Mobile Game Jam. Se trata de crear versiones u opciones en clave verde de conocidos videojuegos. Los jugadores de Transformers descubren así la importancia de utilizar energías renovables –el helio harvester genera energon de forma sostenible–. Los de Angry Birds pueden discurrir por sendas que favorezcan la reforestación. En Subway Surfers se ha creado –para su tour mundial surfero– una parada especial en la isla de Bali, cuyo turismo de masas amenaza su enorme y muy rica biodiversidad marina. El proyecto incluye competiciones gamer periódicas en formato online y a escala global.

Apps: simples y con mensajes claros

Un completo artículo de la revista Educación 3.0 incluye un largo listado de apps creadas por instituciones públicas y privadas, siempre con una clara vocación de educar en el respeto al medioambiente. Allí encontrarás un juego inspirado en la famosa activista Greta Thunberg. O una aplicación de la Diputación Foral de Guipúzcoa centrada en que los alumnos se impliquen personalmente en la lucha contra la contaminación. En la misma línea, Desafío Ambiental propone retos para reducir la huella ecológica mediante acciones concretas como rebajar el consumo energético o mejorar los hábitos de consumo.

A través de diferentes aplicaciones y videojuegos aprendemos a reducir la huella ecológica, entender las consecuencias del cambio climático o conocer la biodiversidad del planeta

Hay otras apps con un perfil más técnico, como AirVisual, que disecciona los elementos que causan polución en la atmósfera, así como mediciones y predicciones en distintos lugares del mundo. Respira! incide en la contaminación atmosférica, en este caso recomendando lugares o zonas de una ciudad donde el aire es más limpio. Con ellas, puedes descubrir, junto a los alumnos, cuán contaminado está un lugar y compararlo con ciudades vecinas.

Diversión con sentido en los serious games

A medio camino entre el videojuego comercial y las apps puramente didácticas, los serious games o juegos formativos van ganando terreno en la escuela. En su vertiente medioambiental, diversos entes (con frecuencia universidades) desarrollan serious games cada vez más sofisticados. The Climate Trail –uno de los más conocidos– propone una travesía de atmósfera apocalíptica por unos Estados Unidos azotados por los efectos del cambio climático. Con un diseño más simple, el paquete EarthGames, desarrollado por la Universidad de Washington, incluye opciones sobre especies protegidas o calentamiento global. ¿Y si, en una sesión de gaming en clase, reflexionamos sobre las consecuencias reales del calentamiento global y proponemos ideas sobre cómo mitigarlas?

El juego en entornos naturales (o parques urbanos) genera un vínculo entre alumno y naturaleza

…y un rincón analógico

Aunque a veces se asocia a formatos electrónicos, la gamificación o ludificación se refiere, sin más, al aprendizaje con fuerte componente lúdico. Y no olvidemos que el juego en entornos naturales (o parques urbanos) genera un vínculo entre alumno y naturaleza que trasciende a las, por otra parte, infinitas posibilidades que brindan las pantallas. Las yincanas ecológicas no solo fomentan el amor por la flora y su inagotable capacidad de sorprendernos. Bien planteadas, pueden incidir en aspectos clave como son los cambios de hábitos y fomentar valores pro ambientales. Por su minuciosa descripción, os remitimos a una de las muchas que podéis encontrar en internet. En el recinto escolar, la asignatura de Educación Física quizá permite, por su carácter dinámico y su desarrollo en exterior, un mayor potencial lúdico. El profesor Francisco Javier Vázquez, que enseña en un pequeño pueblo de Sevilla, explica en su web varias formar de aunar juego, deporte y medioambiente.

Juegos, videojuegos, aplicaciones… conectar nuestro día a día con la protección y cuidado del medioambiente no está reñido con la diversión. La cada vez más popular gamificación nos ofrece cientos de opciones diferentes, en distintos idiomas, que nos permitirán no solo acercar la naturaleza a nuestros alumnos, sino fomentar buenas prácticas, trabajo en equipo y practicar, de paso, inglés. Estos han sido algunos de los ejemplos más completos que puedes encontrar en la red, pero seguro que tú tienes más. ¿Los compartimos?

En  Mi aula Naturaliza encontraréis muchos recursos que apuestan por la gamificación, con dinámicas lúdicas, vivenciales y emocionales. Un ejemplo está incluido en la salida fuera del aula ¿Dónde está mi casa?, dirigida al alumnado de 2º de Primaria. En la parada 3 – dinámica 6 os proponemos la adaptación de un juego tradicional. Mediante el “pilla-pilla de cotorras argentinas a gorriones”, el alumnado conocerá algunos de los impactos que genera el abandono de mascotas exóticas en un hábitat diferente al que están adaptadas, tanto sobre ellas como sobre el resto de seres vivos del ecosistema.

Texto: Rodrigo Santodomingo